¿Espíritu navideño?

“Esto ya no es lo que era”. Eso es lo que pienso cuando llegan estas fechas navideñas. Pensamiento que se arma de valor cuando justo antes de sentarte a comer en Nochebuena te das cuenta que este año no se ha montado el arbolito de Navidad. El Belén tampoco, pero no es el primer año. ¿Dónde dejarán los Reyes este año los regalos?... ¿Qué regalos?

Y es que desde que descubres que los Reyes Magos no vienen en camello y que son dos en lugar de tres, te das cuenta de por qué siempre se equivocaban en algo de la Carta, aparte de que empieza a costarte el dinero y más de un quebradero de cabeza en preguntas tales como ¿qué le compro?, ¿le gustará?, ¿le quedará bien? O ¿tendrá ya uno?.

Pero hay más. Antes estudiaba para pasar una Navidad tranquila y de vacaciones. Ahora, con la Universidad, se le ha dado la vuelta a la tortilla: prolongas el verano hasta Navidad y, justo al llegar ésta, se acabaron tus vacaciones. Ya lo dijo Periñán, aunque no sea invención suya: “La Navidad es un período no lectivo”. De estudio intensivo. Esto último sí es invento mío.

¿Y el amor? ¿Y la paz? ¿Y el espíritu navideño en general?... Yo, sinceramente, por más que busco no lo llego a encontrar. “¿Y la “peazo” Nochebuena que nos pegamos?” Bebo todos los fines de semana. “Güeno, pero todavía queda Nochevieja”. Puedo beber todos los fines de semana.

No me toméis por un aguafiestas, probablemente me veréis mañana disfrutando como el que más, pero eso no quita que la Navidad haya perdido, para mí, más de lo que yo mismo pensaba. No sé si será porque llevo toda ella metido en una biblioteca tratando de concentrarme y estudiar, o será por el frío y la lluvia, o porque no me hace ilusión salir una tarde o noche entresemana y esconderme. No lo sé.

Otro aspecto que quiero resaltar es el, ya archiconocido, afecto existente entre Navidad y El Corte Inglés. Sólo diré al respecto que, este año al menos, lo que antes solía traer Papá Noel, lo traerán con un poco de suerte los Reyes Magos. ¿Cómo se le dice a un niño que este año no han venido los Reyes? Al menos si vinieran en coche se les podría decir que se han quedado sin gasolina (próxima entrada que publique será sobre esto), pero es que vienen en camellos…

En fin, yo este año me conformaré con seguir contando con vuestra amistad. No necesito más. Bueno sí, lo típico de salud y amor, porque el dinero lo veo más difícil. 

Sin más, levanto mi copa esperando que estéis pasando una Feliz Navidad y deseándoos un próspero Año 2011.